jueves, 18 de enero de 2018

EL DESAPEGO -Anthony de Mello


"En la vida de las abejas encontramos una gran lección. En general el hombre construye para sí, piensa en el valor de la propiedad, ambiciona conseguir más bienes, sufre y pelea ante la inminencia de perder aquello por lo que ¨ luchó ¨ por conseguir. Prisionero en un plano denso, pierde oportunidades de experiencias superiores.
En cambio las abejas fabrican su alimento sin destruir nada, además, donan la mayor parte. La lección de las abejas está en su espíritu de donación. En un acto poco común de desapego, abandonan lo que les llevó una vida construir. Simplemente lo sueltan sin preocuparse por el destino que tendrá".
Podemos decir que el apego es un estado emocional de vinculación compulsiva a una cosa o persona determinada, originado por la creencia de que sin esa cosa o persona, no es posible ser feliz.. Tu mente dice: No puedes ser feliz si no tienes tal o cual cosa, o si tal persona no está contigo. No puedes ser feliz si tal persona no te ama. No puedes ser feliz si no tienes un trabajo seguro. No puedes ser feliz si no das seguridad a tu futuro. No puedes ser feliz si estás solo. No puedes ser feliz si no tienes un cuerpo a la moda. No puedes ser feliz si los otros actúan así. Y cuantos mas ’No puedes ser feliz si....’ Permanentemente te demuestras (si no es por una cosa, es por otra) que no puedes ser feliz. 
¡Todo esto es falso!. Todas las cosas a las que te apegas, y sin las que estás convencido que no puedes ser feliz, son simplemente tus motivos de angustias. Si queremos ser libres, si queremos dejar de sufrir por lo que tenemos o por lo que no tenemos, deberemos abrigar un único deseo: Transformarnos, desprogramarnos, soltar las ataduras. ¿Qué es tu programación?. Eso que llevas dentro de tu computadora cerebral, que se formó acumulando los datos recibidos: Tu cultura, tus ideas, tus creencias, tus miedos, tus apegos, tus hábitos. El ejercicio consiste en tener presente que nada ni nadie nos pertenece, que no vinimos al mundo para poseer cosas o personas y que debemos soltarlas. 
El sufrimiento llega cuando nos aferramos a algo o a alguien.
El apego empaña lo que debería estar claro: por detrás de una supuesta pérdida se esconde la enseñanza de que está por llegar algo nuevo y mejor para nuestro crecimiento. 
Si no renunciamos a lo viejo ¿Cómo puede haber espacio para lo nuevo?. 
Quisiera preguntarte.... ¿ a que estas apegado?, ¿ qué temes perder?, ¿ personas que ya no amas o no te aman , vínculos que te lastiman que aún preferís conservar? ¿ Profesiones que ya no te desafían a poner en ellas todo tu potencial?
La felicidad y la desdicha dependen de cómo afrontemos los acontecimientos, no de la naturaleza de los acontecimientos en sí"
Es el apego a las cosas que te proporcionan felicidad lo que te hace sufrir. No has de apegarte a ninguna cosa ni a ninguna persona, ni aún a tu madre, porque el apego es miedo, y el miedo es un impedimento para amar.

Cómo ganar la batalla a los apegos

Pasa revista a todos tus apegos y ataduras, y dile a cada persona u objeto que te venga a la mente: "En realidad no estoy apegado a ti en absoluto. Tan sólo estoy engañándome a mí mismo creyendo que sin ti no puedo ser feliz". Limítate a hacer esto con toda honradez, y verás el cambio que se produce en ti: En realidad no estoy apegado a ti en absoluto. Tan sólo estoy engañándome a mí mismo creyendo que sin ti no puedo ser feliz". Y luego, todo lo que hay que hacer es ver, pero ver realmente, las siguientes verdades.
Primera verdad: estás aferrado a una falsa creencia, a saber, la de que sin una cosa o persona determinada no puedes ser feliz. Examina tus apegos uno a uno y comprobarás la falsedad de semejante creencia. Tal vez tu corazón se resista a ello; pero, en el momento en que consigas verlo, el resultado emocional se producirá de inmediato, y en ese mismo instante el apego perderá su fuerza
Segunda verdad: si te limitas a disfrutar las cosas, negándote a quedar apegado a ellas, es decir negándote a creer que no podrás ser feliz sin ellas, te ahorrarás toda la lucha y toda la tensión emocional que supone el protegerlas y conservarlas. ¿No conoces lo que es poder conservar todos los objetos de tus distintos apegos, sin renunciar a uno sólo de ellos, y poder disfrutarlos más aún a base de no apegarte ni aferrarte a ellos, porque te encuentras pacífico y relajado y no sientes la menor amenaza en relación a su disfrute?
Tercera y última verdad: si aprendes a disfrutar el aroma de un millar de flores, no te aferrarás a ninguna de ellas ni sufrirás cuando no puedas conseguirla. Si tienes mil platos favoritos, la pérdida de uno de ellos te pasará inadvertida, y tu felicidad no sufrirá menoscabo. Pero son precisamente tus apegos los que te impiden desarrollar un más amplio y más variado gusto por las cosas y las personas. A la luz de estas tres verdades, no hay apego que sobreviva. Pero la luz, para que tenga efecto, debe brillar ininterrumpidamente. Los apegos sólo pueden medrar en la oscuridad del engaño y la ilusión. Si el rico no puede acceder al reino del gozo y de la alegría, no es porque quiera ser malo, sino porque decide ser ciego
 Anthony de Mello

miércoles, 17 de enero de 2018

10 principios esenciales del despertar - Jeff Foster

Hoy o mejor esta semana inicio mis compartir por este medio...un nuevo ciclo que traerá grandes sorpresas y grandes cambios...namaste.

NO HAY NINGÚN DESTINO, SÓLO EL MOMENTO PRESENTE
Sólo hay ESTO; la presente escena de la película de tu vida. Sal de la historia épica del tiempo y el espacio, del pasado y el futuro, de la culpa y la anticipación, y de la búsqueda de los diferentes estados y experiencias; relaja el foco habitual que has puesto en ‘lo que se ha ido’, ‘en lo que aún no llega’ – cosas que no puedes controlar desde donde estás. Sal de la historia de ‘Mi Vida’ y date la oportunidad de sentirte fascinado por lo que está vivo, aquí, en este momento. Siéntete curioso por esta emocionante danza de pensamientos, sensaciones, sentimientos e impulsos que están ocurriendo justo en donde estás. Recuerda, el Ahora es el único lugar desde donde las verdaderas respuestas pueden surgir. El momento presente es tu verdadero hogar, anterior al tiempo y al espacio.
EL PENSAR GENERA SUFRIMIENTO
 El dolor no es el problema, el problema es lo que pensamos acerca del dolor; nuestra resistencia a la incomodidad, nuestro intento de escapar. El verdadero problema empieza cuando comenzamos a rumiar nuestro dolor, nuestra tristeza, nuestros miedos, nuestra ira; cuando nos inquietamos con nuestras molestias, ¡retrasando y adelantando la película! Cuando le damos vueltas en la cabeza a las tristezas de ayer y mañana, en lugar de explorar y experimentar directamente los momentos difíciles de hoy conforme van apareciendo. Añadimos una capa innecesaria de pensamiento y resistencia a la vida, y esto genera sufrimiento. ¿La invitación? Sal del pasado y el futuro, de la búsqueda y la lucha, y reúnete con la vida en el crudo e inmediato ahora, sin juicios y sin esperar que la ‘paz’, la ‘relajación’, la ‘iluminación’ o cualquier tipo de cambio llegue. Únete al momento bajo sus propios términos; velo como un regalo. Déjate tocar por lo agradable y lo desagradable, por lo placentero y lo doloroso, sin una agenda.
NI LOS PENSAMIENTOS NI LAS SENSACIONES SON PERSONALES
Ve los pensamientos y sensaciones como eventos neutrales e impersonales que surgen en la consciencia. Al igual que los sonidos que escuchamos, los pensamientos y sensaciones físicas surgen y desaparecen en forma espontánea, como olas en el océano que Eres. De nada de eso te puedes escapar, tampoco puedes controlarlo o eliminarlo. Esa misma actitud amorosa que tienes para con los sonidos, cultívala para con los pensamientos y sensaciones. Recíbelos con la misma actitud de amabilidad y curiosidad. Velos como si fueran tus propios invitados a tu presencia.
TÚ ERES EL ESPACIO QUE ACOGE A LOS PENSAMIENTOS
Los pensamientos no son tú, y no son la realidad; son sólo sugerencias, posibilidades, rumores, propaganda, juicios, voces, imágenes, recuerdos o proyecciones futuras – nubes en el vasto cielo que Eres. No intentes aquietarlos, silenciarlos o detenerlos, no trates de deshacerte de ellos, ni eliminarlos o controlarlos. Sé el espacio para ellos, ¡incluso si están demasiado activos en este momento!Recuerda, si notas los pensamientos, si te haces plenamente consciente de su movimiento, no te verás atrapado en ellos. Ellos no te definen. Tú eres el imperturbable contenedor, no el contenido. Sé lo que eres – el inmutable abrazo para cada pensamiento.
RESPIRA EN EL MALESTAR Y EL DOLOR
Respira en el corazón de las sensaciones de malestar; dales dignidad. Hónralas, en lugar de cerrarte a ellas y matarlas de hambre y frío. En una inhalación imagina o siente tu aliento moviéndose a través de las partes involucradas e imbúyelas con vida y amor. Llena esa región que se siente incómoda en tu cuerpo con oxígeno, amor y dignidad. No trates de ‘curar’ las sensaciones. Ellas sólo quieren ser tomadas en cuenta, ser honradas, y ser incluidas en la presente escena. Asume que incluso el malestar contiene inteligencia; que no está en tu contra.
LA ACEPTACIÓN NO ES UN ‘HACER’, LA ACEPTACIÓN YA ES
La aceptación no significa que algo desagradable vaya a desaparecer. Eso podría quedarse un rato. No intentes aceptarlo (porque eso normalmente es resistencia disfrazada), más bien reconoce que eso YA ha sido aceptado, aquí. Trátalo como algo que tal vez estaría aquí por siempre. Eso elimina la presión del tiempo, (tratando de que se vaya, preguntándote por qué “sigue ahí”). Eso ESTÁ aquí, ahora. Haz una reverencia ante ESTA realidad. Sé curioso. Y permite que cualquier urgencia, cualquier sentimiento de frustración, aburrimiento, decepción e incluso desesperación aparezca y sea incluida. Todo ello es parte de la presente escena, no un obstáculo. ¡Incluso la sensación de que hay algún obstáculo es parte de la escena!
NO EXISTE EL ‘SIEMPRE’, NO EXISTE EL ‘NUNCA’
En realidad no existe el ‘siempre’ ni el ‘nunca’. Hazte plenamente consciente de esas palabras; son mentiras, y pueden crear un sentido de urgencia e impotencia; alimentan la historia de la búsqueda y la escasez. No hay un ‘resto de mi vida’, ningún ‘por años’, ningún ‘todo el día’. Sólo hay el Ahora, tu único lugar de poder. A veces incluso pensar acerca de mañana resulta demasiado. Sé aquí.
SÓLO PUEDES LLEGAR ‘ALLÁ’ A TRAVÉS DE SER ‘AQUÍ’
Muchas veces nos enfocamos tanto en la meta, en el destino, que olvidamos el viaje, nos desconectamos de cada precioso paso y generamos estrés. Confía en que el simple hecho de estar presente te llevará hacia donde tienes que estar. Retira tu atención de los 10,000 pasos que han de venir, de los 10,000 pasos que aún no das, y recuerda el paso de este momento, el antiguo y vivo suelo. A menudo no sabemos hacia dónde nos dirigimos, y eso está bien. Haz amistad con la incertidumbre, con la duda; aprende a amar este lugar sagrado sin respuestas. Está vivo y es creativo y está lleno de potencial.
ABRAZA TUS TROPIEZOS
Si te das cuenta que te has perdido en una historia, que te has desconectado, celébralo. Simplemente te has despertado de un sueño. Una gran inteligencia está viva en ti, un poder que te permite darte cuenta y conectarte. Has salido de millones de años de condicionamiento. No te castigues por haber olvidado, mejor celebra tu capacidad de recordar. ¡A este momento no le interesa si te olvidaste de él! Olvidar es una parte perfecta de la película. ¡Permítete olvidar, a veces! Deja que el camino te haga más humilde, en lugar de tratar de ser ‘perfecto’. La duda, la decepción y la desilusión serán tus constantes compañeros a lo largo de este camino sin camino. No hay ningún destino en la Presencia, no hay ninguna imagen de ‘éxito’ que tenga que defenderse. No puedes equivocarte, cuando no hay ninguna imagen de lo que es ‘correcto’.
NUNCA TE COMPARES
Eres único; tu viaje es absolutamente original. Todos podemos ser expresiones del mismo océano de la consciencia, pero al mismo tiempo, todos somos una expresión única de ese mismo océano, ¡olas absolutamente únicas! ¡Nunca te compares con nadie! Cuando comienzas a compararte devalúas tus únicos e irremplazables dones, talentos  y verdades, y te desconectas de tu tan singular experiencia presente. No compares este momento con ninguna imagen de cómo pudo o debió haber sido. La sanación se hace posible cuando dices SÍ al sitio en donde te encuentras ahora, incluso si no es en el que habías soñado estar ‘ahora’. Confía, y confía a veces en que no puedes confiar. Tal vez, aquí, puedas confiar en tu falta de capacidad para confiar, e incluso la sensación de que no puedes soportar este momento, esté siendo ya aceptada…
por Jeff Foster