martes, 14 de febrero de 2017

Eckart Tolle- Transformar la enfermedad en iluminación


Eckart Tolle: La enfermedad es parte de su situación vital. Como tal, tiene un pasado y un futuro. El pasado y el futuro forman un continuo ininterrumpido, a menos que el poder redentor del Ahora se active por medio de su presencia consciente. Como sabe, bajo las diferentes condiciones que forman su situación vital, que existen en el tiempo, hay algo más profundo, más esencial: su Vida, su verdadero Ser en el Ahora sin tiempo.
Puesto que no hay problemas en el Ahora, no hay enfermedad tampoco. La creencia en una etiqueta que alguien adhiere a su condición la mantiene en su lugar, le da fuerza y hace una realidad aparentemente sólida de un desequilibrio temporal. Le da no sólo realidad y solidez sino también una continuidad en el tiempo que no tenía antes. Al concentrarse en este instante y evitar rotular a la enfermedad mentalmente, se reduce a uno o varios de estos factores: dolor físico, debilidad, incomodidad o incapacidad. Eso es a lo que usted se somete ahora. Usted no se somete a la idea de “enfermedad”. Permita que el sufrimiento lo empuje hacia el momento presente, hacia un estado de intensa presencia consciente. Úselo para la iluminación.
La entrega no transforma lo que es, al menos no directamente. La entrega lo transforma a usted. Cuando usted está transformado, todo su mundo se transforma, porque el mundo es sólo un reflejo. Hablamos de esto antes.
Si usted mirara en el espejo y no le gustara lo que ve, tendría que estar loco para atacar a la imagen del espejo. Eso es precisamente lo que usted hace cuando está en un estado de no aceptación. Y, por supuesto, si usted ataca a la imagen, ella le devuelve el ataque. Si usted acepta la imagen, no importa lo que sea, si usted es amistoso con ella, no puede no ser amistosa con usted. Así es como usted cambia el mundo.
La enfermedad no es el problema. Usted es el problema, mientras la mente egotista tenga el control. Cuando usted está enfermo o incapacitado, no sienta que ha fracasado, no se sienta culpable. No culpe a la vida por tratarlo injustamente, pero tampoco se culpe a sí mismo. Todo eso es resistencia. Si usted tiene una enfermedad grave, úsela para la iluminación. Cualquier cosa “mala” que ocurra en su vida, úsela para la iluminación. Retire el tiempo de la enfermedad. No le dé pasado ni futuro. Haga que ella lo obligue a tener una conciencia intensa del momento presente, y vea lo que pasa.
Conviértase en un alquimista. Transmute el metal bajo en oro, el sufrimiento en conciencia, el desastre en iluminación. ¿Está gravemente enfermo y enfadado por lo que acabo de decir? Entonces es un signo claro de que la enfermedad se ha vuelto parte de su sentido de sí mismo y de que usted está protegiendo ahora su identidad, así como a la enfermedad. La condición clasificada como “enfermedad” no tiene nada que ver con quien es usted verdaderamente.

miércoles, 1 de febrero de 2017

Somos espejos

Cada persona que aparece en nuestro camino es un reflejo de una parte mía. Desde la pareja, hasta el habitante de calle que duerme en la acera fuera de mi casa son muestras de un reflejo de mi vida.

A veces esos espejos se nos presentan y desde el ser humilde se aceptan, otras la soberbia es la que domina y nos hace ciegos para ver que el otro es mi reflejo y esta soberbia crea limitantes y barreras de falso orgullo y la vida con su sabiduría nos sigue colocando en el camino dicho espejo para que logremos ese cambio. Por ej, una mujer que se casa con hombre alcoholico, se divorcia por no lo aguanta y se casa y le aparece lo mismo, esto demuestra que el aprendizaje es ineludible y es mejor aceptar y mirar que debo tomar para seguir caminando y no resistirme.

Un habitante de calle me decía ante un reclamo de mi parte, que lo dejara donde estaba, él había decido vivir así...eso me mostró que ciertamente todos son elecciones de vida y ante todo que ese habitante tenía un orgullo soberbio y asi era yo, además que me como mecanismo de defensa utilizaba la grosería en mi tono de voz para mostrar que era autoritario tenía control de la situación, pero la verdadera enseñanza de la situación es que el otro elige, que por más tono de voz fuerte y grosero obtengo una respuesta grosera y fuerte, que la humildad es mejor camino y de que me tengo que defender...que no debo ver ataques en todo, que el mundo no esta en contra mía.

También veo en mi pareja actual, que es un espejo típico de lo que soy, ella calmada y ante todo queriendo hacer todo, autosuficiente, fuerte, tolerante...y si además ella es contratista, que espejo tan grande...yo autosuficiente, fuerte y aparentemente tolerante y cuando laboraba era supervisor de contratistas y era algo grosero y quizás déspota con los contratistas...que aprendizaje y darme cuenta que nuevamente la autosuficiencia es un falso orgullo y alto ego, que ser fuerte o débil es mostrar algo inútil porque ser vulnerable no es malo...en fin ver cosas en ella que debo aprender para seguir creciendo. Así se presentan situaciones y momentos que ofrecen la oportunidad de evitar juzgar, de tener compasión y de aprender humildemente.