martes, 6 de enero de 2015

Meditación

Meditar es silenciar una mente activa y en constante movimiento. Yo lo inicie hace algunos años con dificultad, incluso hoy no soy del todo "silencioso" mentalmente, pero si siento que me ayuda bastante a calmar mi ego. Inicie trabajos de meditación como parte del llamado interior a transformarme, he sido una persona intensa en los quehaceres, de mucha racionalidad...tengo varios diplomas que demuestran que durante toda mi vida he buscado el saber, y este saber fue un refugio inicial, al sentirme rechazado y solitario en mi infancia, juventud y adultez. La soledad me hacía refugiar en el cine y las bibliotecas, era un miedo tenaz a relacionarme con otros por temor a ser rechazado...aún tengo varias secuelas y no supero del todo eso, pero ya soy consciente que son cosas programadas e infundas en mi mente. También me percate que por muchos diplomas que tuviese y conocimiento y saberes, no encontraba la paz a una amargura y angustia existencial.

Fue con el tiempo y esa intuición, que no sabía que tenía, que con el tiempo...el camino me fue llevando a un despertar y liberación que hoy llevo aún, cada día es un peldaño...

Inicialmente meditar, para mi mente y ego supersabios, era una cosa casi imposible y los ataques eran fuertes para dejarlo de hacer, calmar ansiedad, estres, dolores existenciales para una menta apegada y programada en el mundo material no era sencillo...con la persistencia y el caminar en mi transformación interior, gracias a circunstancias como golpes físicos, emocionales y a amistades y familia, fue que logre ir acallando mi mente y por ende escuchando mejor a Dios...así mi mente...mi ego...ha ido bajando y con ello la angustia y mis miedos van desapareciendo para dar paso a la luz esencia divina que soy y que he sido.

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