Dia 31
El miercoles fue el día de la psicologa en la mañana, mi ex llego tarde y luego no seguí mis instintos y llegamos más tarde, en fin fue rico ir allá, ya pasamos a contar más historias y cosas que le suceden a nuestra hija con la separación y en las casas donde le corresponde pasar según días de la semana, la verdad la ví muy atractiva en este día, se había organizado y pintado los labios, me fije en sus senos, temí estarme reenamorando y estar enamarado pero todo paso momentaneamente. Una palabra de la psicologa me dejo retumbando en mi mente: Abandono. Los humanos tememos el abandono, la verdad yo creo que eso me ha pasado a mí con ella, siento que estoy siendo abandonado y me le aferro sabiendo que yo quería abandonar primero, no fui capaz y ahora lo fue y me siento tonto por no haber sido fuerte y haberme ido, todavía no siento la fuerza para irme del todo pero cada vez siento que sería lo mejor. Otro pensamiento que me sucedió que me dejo un vacío era creer que ella tuviese otro primero que yo, entendí que a mi me molestaba no ser el primero, porque inmediatamente mi mente dijo y si lo hago yo que? y me sentí tranquilo, veo que mi ego ha cedido y tiene momentos que me pone en jaque, peo son cortos, aún así no debo desfallecer. Al final, creí que si ella tendría otro, tarde o temprano puede suceder, ah otra cosa era sentir que la niña de pronto en algún momento no querrá estar con ella o conmigo, de hecho a veces lo siento porque creo que se siente más confort con la madre, eso me dió miedo, mi ego nuevamente, inmediatamente y también posterior a ello, decidí que debo seguir reforzando mi trabajo interior, porque pase lo que pase con ella y con mi hija, si estoy iluminado y con amor y paz, esto no me dañará, me entristecera, me dará dolor, pero si vivo en el amor de Dios, con seguridad lo superaré, además aunque todo se acabe con ella, mi hija será mi hija. En la noche compartí con ella y fue muy grato. Sigo adelante.
Día 32
Hoy jueves me levante temprano, no tenía que ir a trabajar, dormí con mi hija hasta pasadas las 8am, lave ropa, preparé mi desayuno, hubo momentos que me sentí solo, mi hija fue mi gran compañia, hable varias veces con la madre, en fin fue un día de transición y ahora me siento tranquilo. Lo más conmovedor fue ir a reuniones de trabajo y dejar mi hija con mi madre, lloró fuertemente y casi me devuelve, me sentí culpable, al fin entendí que esto puede suceder pero no soy mal padre. En la noche la madre la recogió a través de su hermano. Yo estuve en casa temprano, me llamo una amiga con la que me ví hace una semana, yo desde que me vine de la oficina quería como compartir con alguien y no encontre, pero al hablar con ella largamente por teléfono, me sentí más tranquilo. Voy para adelante y mañana es un gran día. Me amo, te amo y amo a mi prójimo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario